ABRIENDO PUERTAS - PARTE I
El sonido de la vibración del móvil me despertó, por un instante lo ignoré para seguir durmiendo un poco más hasta que me acordé de Paul y las normas de nuestra relación. Lo cogí velozmente y allí estaba. - "Buenos días, pequeña. ¿Cómo fue la noche?" No os mentiré, ese mensaje me dejó descolocada. ¿Acaso nuestra relación no se basaba solo en el sexo? ¿También iba a tratarme bien y a prestarme atención? Los otros chicos nunca escribían, solo uno y en una sola ocasión me escribió por la mañana y fue para decirme: "Mira como me he levantado. ¿Me ayudas a bajarla?". Estaba claro que Paul era diferente, y que lo que habíamos empezado parecía más serio de lo que imaginaba. - "Buenos días, amo. La noche fue realmente bien, caí rendida después de correrme. Me has despertado con tu mensaje". - Contesté esperando una reacción parecida a la de aquel chico. - No sabes como me alegra leer eso. Si estás cansada, duerme un poco más, es importante que estés des...